Ya decía Woody Allen que el sexo es sucio sólo cuando se hace bien. Y es que en una época en que la gente debía recurrir a revistas y el incipiente mercado del VHS, los ceros y unos comenzaron a ponerse sexys.
Seguro que si digo "More Mandy" muchos de vosotros sabréis de lo que hablo. Y es que pocas veces un vídeo fue tan visto y compartido por los jóvenes de medio mundo.
Muchas compañías descubrieron que el sexo podía ser un negocio lucrativo y los juegos picantes comenzaron a aparecer en el mercado.
¿Qué aficionado a las aventuras gráficas no se ha sentido un poco cochino jugando al Larry? Larry no era más que un alter-ego de millones de pajerillos deseosos de tirarse a cualquier cosa que se cruzase en su camino. Y ahí radicaba su éxito. Daba rienda suelta a nuestras fantasías de una manera anónima. Eras tú y el ordenador. Nadie más.
En este especial pasemos algunos de los juegos más picantes que han aparecido a lo largo de la historia. Y tranquilo, si has jugado a todas ellos no eres un obseso... Sólo una persona con inquietudes...