El Proyecto de la Bruja de Blair » Crítica

Por Dario García-Verdugo Vargas

"¿Qué es eso? Tengo miedo de cerrar los ojos. Dios mío, vamos a morir aquí." (Heather Donahue).

Todo un ejemplo de cómo hacer una exitosa y taquillera película de terror con un mísero presupuesto, un dat, una videocámara, una cámara de cine y mucha, mucha ilusión.

A pesar de que promocionar el film como una película rodada por tres jóvenes estudiantes desaparecidos en Maryland ayudara a alcanzar una gran publicidad y una recaudación de 150 millones en las salas, El Proyecto de la Bruja de Blair contaba con los ingredientes suficientes para convertirse en un clásico del género, que además consiguió el record de película independiente más rentable, hasta entonces en posesión de la carpenteriana La noche de Halloween.

La falsa historia publicitaria se propagó de forma descontrolada por toda la red y todo el mundo quería verla. Para cuando se desveló el engaño la película ya contaba con el apoyo de la crítica y del público.

Tal vez lo único que puede reprochársele al film es su falta de ritmo y los movimientos bruscos de cámara para simular así una grabación aficionada . Los actores están a la altura, sobretodo la aterrorizada Heather Donahue con su conmovedor discurso solicitando perdón a todos y los últimos diez minutos son magistrales creando una curiosidad y un suspense impresionantes.

El Proyecto de la Bruja de Blair no necesitó efectos especiales, sangre, ni historias enrevesadas, su simplicidad fue suficiente para asustarnos y hacernos creer su historia.

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