El pequeño Nicholas es dejado una noche a cargo de Remington, un tipo violento que no duda en llamar a sus amigos para acompañarle (incluso a un camello pedófilo).
El único consuelo que le queda a Nicholas es su conejo de pascua... Al día siguiente, el pequeño desaparece pero un Conejo sediento de sangre decide tomarse la venganza por su mano...
Frikada total, con paralelismos a La Última casa a la Izquierda, pero muy divertida y con algunos asesinatos apoteósicos...