“Si no hubiera ido a la Universidad de Yale, habría hecho cosas positivas con mi vida, pero allí me metieron en una habitación con dos fanáticos del cine, entonces supe que mi vida había cambiado irremediablemente”
Lloyd Kaufman quería ser director de cine, se graduó en Yale, y cuando terminó sus estudios, se lanzó a ello siguiendo ciegamente su idealismo rebelde y descarado, de modo que decidió invertir todos sus ahorros, en un largometraje que además de escribir y dirigir también iba a interpretar, el largometraje es cuestión se titulaba “The battle of love’s Return” (1971), según Kaufman, la película era un retrato social sobre un tipo que intenta encajar en una sociedad que no le comprende, hoy día se la podría considerar como una película autobiográfica.
Dado que la “genialidad” de Kaufman no coló, y no disponía de mas presupuesto para dirigir un segundo film, se tuvo que buscar la vida colaborando con directores ya asentados en la industria cinematográfica, y participando en películas de las grandes compañías.
Algunos de los proyectos en los que colaboró en esa época fueron los siguientes: -“Rocky” de John G Avildsen, participando como extra y supervisor de la pre-producción , años mas tarde reaparecería en Rocky V, pero en esta ocasión solo como extra. -“Slow dancing in the big City”, un drama musical ambientado en Nueva York, en el que también aparecía como extra pero con mas minutos en pantalla, también a las ordenes de su amigo John G Avildsen. -“Fiebre del sábado Noche” de John Badman, como encargado de buscar las localizaciones del filme.
No se sabe como, pero la experiencia de Kaufman no acabó de cuajar del todo, y no le aceptaron dentro del “mainstream”, de modo que se decantó por el camino mas fácil para ser director, introducirse en el mundo de la pornografía.
Empezó produciendo esta clase de películas, e incluso llego a dirigir algún que otro titulo bajo el pseudónimo de Louis Su, alguno de los títulos de esta etapa de “El rey del cine basura” son: -“The Newcomers” (1972), Dirección y Producción -“Sweet & Sour” (1974), Dirección -“Exploring young Girls” (1975), Fotografía -“The divine Obsesión” (1975), Dirección, Guión, Producción y Montaje
Es en esta etapa cuando conoce a Michael Herz, un abogado que se aburría en su trabajo, y fundan Troma films, cuyos comienzos distan mucho en todos los sentidos de cómo la conocemos hoy en día, en un principio solo producían comedias sexuales de adolescentes, algunos de los títulos a destacar son los siguientes:
-“Waitress!” (Camarera! -1982) -“Stuck on you!”(Pegado a tí! - 1983) -“The first turn-on!” (La primera vez!-1983) No pasa mucho tiempo hasta que Kaufman y Herz se cansan de producir este tipo de películas, y deciden meterse de lleno en el terreno del horror gore, es en ese momento cuando crean lo que fue, es, y será el logro de mayor reconocimiento de esta atípica compañía, “The toxic Avenger” (El vengador Tóxico- 1985), película que dio a conocer a la Troma en el mundo entero.
El tandém, Kaufman/Herz por fin había logrado su anhelado sueño, muchos pensaron que el estilo de la película era nuevo y revolucionario, debido a esto, se gano la denominación de “Película de Culto”, culto que ha día de hoy sigue creciendo de forma acentuada.
Kaufman y Herz vieron el éxito en la combinación de humor chusco y gore, de modo que decidieron plasmarlo en todas las películas que siguieron a su obra de culto, a medida que la productora crecía, Kaufman veía su sueño de integrarse en el “mainstream” cada vez mas cerca, de modo que en pleno auge Tromatico se rodaron las secuelas de su obra magna a la misma vez, aunque no son del todo malas, no llegan al nivel de su predecesora, y el humor, la violencia, y la mala hostia que hicieron de aquella un éxito, aquí brillaba por su ausencia, signos estos, de que dentro de la Troma estaba ocurriendo algo.
No se tardo mucho en confirmar la noticia, Troma iba a cambiar de nuevo los ideales de su cine, darían la espalda a aquello que les dio la fama, de modo que Kaufman y Herz anunciaron que dejarían de producir películas gore porque era algo que ya no les interesaba, poniendo como excusa que querían llegar a mas público, cosa que mas tarde lamentarían, se nota que el éxito se les había subido a la cabeza.
Con esta idea fija en los nuevos ideales de Troma, invirtieron mas dinero de el normal para realizar “Sgt.Kabukiman N.Y.P.D” (1991) y “Troma’s War” (1988), esta ultima es descrita con la siguiente frase : “Un cruce entre RamboIII y Lassie”, personalmente no tengo ni idea de lo que quiere dar a entender esa frase, como era de esperar, ambas películas fueron un rotundo fracaso, de ahí se puede deducir que solo hayamos visto de nuevo a Kabukiman en la 3ª secuela de “El vengador Tóxico”.
Aun así, la fiebre Tromatica continuaba sin ningún problema, y a principios de los 90 ya se había extendido por casi toda Europa, la mayoría de los que en ese momento empezaban con los cortometrajes querían emular como bien podían el cine de la Troma, Lloyd Kaufman vivía inmerso en una especie de sueño, pero... los sueños no duran eternamente.
Pasada la fiebre Tromatica, la popularidad de esta empezaba a decaer, y en gran parte se debía a lo pesado que se había vuelto el estilo de Troma, cada vez mas inaguantables.
La única salida viable que les quedaba era volver a sus orígenes, y eso hicieron una vez rota su burbuja de ensueño, Troma regresó a aquello, que aunque les dio la fama lo habían renegado, el gore y la violencia.
Desde 1997 hasta día de hoy Troma sigue produciendo películas con el mismo esquema de su obra maestra, solo cambiándola en un aspecto, que según el espectador puede ser para bien o para mal, la cantidad de violencia, gore y sexo ha sido elevada de forma harto exagerada en todas sus producciones, en muchas de ellas es tan exagerado que lo único que provocan es un sentimiento híbrido entre risa y asco.
Para comprobarlo lo mejor es ver las siguientes películas de las que mas adelante analizare detenidamente: -“Tromeo y Julieta” (1996) -“Terror Firmer” (1999) -“El vengador Tóxico 4” (2000) -“Tales from the Crapper” (Cuentos desde el retrete-2004)
Como último apunte cabe destacar que Troma es realmente promiscua a la hora de realizar películas, entre 10 y 15 películas al año, un dato de gran importancia teniendo en cuenta lo escaso de su presupuesto, que en Troma prefieren la cantidad sobre la calidad es algo que queda claro.
En resumen, tras mas de 30 años, y con una trayectoria no muy acertada, Troma sigue luchando por el cine independiente con cine independiente, tal y como reza el eslogan de “Terror Firmer”, y aunque mucha gente consideran sus películas una tomadura de pelo, se atreven ha hacer lo que todos queremos ver en una película, pero nadie se atreve a pedir.