Sitges 2013: Resumen del día 6
Por Redacción
Publicado el 17/10/2013
Dark Touch, V/H/S 2 y otros problemas técnicos del montón
Bueno, superada la jornada más dura del festival ayer, las cosas vuelven a su cauce. Comienzan a asomar las primeras propuestas más propias de género y que uno espera ver al acercarse al festival. Aunque comienza a haber la sensación de que la sección Noves Visions (títulos más alternativos) ha colonizado la Oficial Fantàstic, dado el tono de las películas seleccionadas.
Nosotros hemos comenzado el día en El Retiro, para el estreno de V/H/S 2. Al fin un poco de terror puro y duro sin añadidos, la película retoma el formato antología de found-footage aumentando los estilos y mejorando el nivel respecto a la primera. Esta ocasión parece que los directores se han querido concentrar en la reinvención de diferentes subgéneros, destacando un par de historias que valen la película entera (la del ciclista y la de la secta). Puro divertimento que entra solo.
Mientras nosotros estábamos aplaudiendo salvajadas, en el Auditori han padecido problemas con los pases de The Congress y Open Grave. La primera se ha visto con un par de parones, mientras que la segunda ha sufrido el no poder proyectar su final. El Festival ha reaccionado rápidamente a esto, cancelando la sesión de Mala para recuperarse de los problemas y volver como un reloj a la sesión siguiente. Pese a la indignación de muchos, la labor de la organización ha sido tremendamente profesional y rápida frente a un problema de este estilo. Desde aquí, lo agradecemos.
La que sí ha empezado a hora ha sido Dark Touch, película de Marina de Van sobre una niña sufridora de abusos y que, para mala pata de sus padres, es una Carrie en potencia. Muchos bostezos para un dramón con toques sobrenaturales, que cuando realmente decide pegar volantazo - todavía no entiendo a santo de qué - ya ha perdido a la mitad del público. Hurm, muy aburrida.
También se ha podido ver Europa Report, una especie de found-footage científico sobre unos astronautas que viajan a la luna de Júpiter y encuentran... bueno, mejor saberlo por sí mismo. Ecos de 2001, como no podría ser de otra manera, además de añadir una pulcritud y paciencia al formato muy difícil de encontrar hoy en día. Se esfuerza en mostrar la parte realista de la historia, aunque se trate de otro caso de ritmo marcado minuto a minuto.
Ojo a lo que ha venido después, Cheap Thrills, de la que muchos aseguran es la película del festival. A la salida el público la ha votado como locos a la puntuación máxima, y todo el mundo parece encantado con el resultado. Nosotros la veremos el próximo sábado, hasta entonces solo podemos transmitir esa sensación general.
Para finalizar el día hemos podido ver, al fin, la nueva película del español Gonzalo López Gallego: Open Grave. Cuenta la historia de un hombre que despierta en una fosa común, habiendo perdido completamente la memoria y rodeado de cadáveres. Pronto encontrará a más gente en su misma situación dentro de una casa cercana, en mitad del bosque. Guau, sorpresón de los buenos, una propuesta original que va desgranando lentamente la verdadera naturaleza de la historia, siendo lo suficientemente inteligente con el espectador como para regalarle los giros a distancia, haciéndole partícipe más de los personajes y la historia que del peso de los descubrimientos. Disfrutable a más no poder, los que esperaban un thriller más de la linea Saw han quedado muy satisfechos (me incluyo).
Con buen sabor de boca marchamos a (o intentamos) dormir, que mañana toca madrugón para ver Gallows Hill, Big Bad Wolves o The Philosophers, así como el loco documental Jodorowsky"s Dune y dejarnos caer para ver cual es el futuro del fantástico en el Coming Soon de este año.

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