A una pequeña ciudad en el norte de Alaska, donde no se ve la luz del sol en invierno durante treinta días, un grupo de chupasangres ha decidido instalarse y alimentarse de la población.
Tras una primera noche en la que acaban con prácticamente la totalidad del pueblo, el sheriff local y un grupo de personas tendrán que hacer todo lo posible por sobrevivir hasta que vuelva a salir el sol.
Hace un par de años David Slade nos aterró con Hard Candy, ese ejercicio disléxico de Caperucita Roja que debería ser de obligada visión para la gente que se escuda en el anonimato de Internet para dar riendas sueltas a sus fantasías... por muy censurables que estas sean.