Exorcismo en Connecticut » Crítica

Por Emilio Martínez

El subgénero de casas encantadas se ha convertido en un reclamo habitual dentro del terror estival que llega a nuestras pantallas. Este año le llega al turno a Exorcismo en Connecticut, título que se ha convertido en una de las sorpresas del año recaudando más de 55 millones de dolares en Estados Unidos.

La premisa de Exorcismo en Connecticut no es demasiado original: una familia se muda a una antigua casa (con su pertinenten pasado) y en ella comienzan a suceder todo tipo de fenómenos extraños. Hasta aquí ninguna sorpresa, es lo que un aficionado al terror esperaría. Como no podía ser de otro modo hay todo tipo de sustos, un continuo mal-rollo y personajes en el umbral entre la cordura y locura. Sin embargo, el director Peter Cornwell consigue ir un paso más allá dotado de cierta humanidad a los personajes (un chico que intenta sobrevivir como puede, una madre desesperada y un padre con tendencia al alcoholismo...) no demasiado habitual en este tipo de películas.

Además, toman como punto de partida un hecho real ocurrido en Southington allá por 1986. Logicamente se han tomado todo tipo de licencias para realizar la película y se han dejado detalles (los padres reales comentaban que habían sido violados y sodomizados por demonios) que tal vez podrían haber enfurecido a la censura americana. Aun así, la explicación a los hechos ocurridos (pese a ese final pelín exagerao) entra dentro de lo razonable.

El reparto está fantástico y comedido. Virginia Madsen es rescatada del olvido y es el contrapunto perfecto para Kyle Gallner, quien interpreta al joven y sufrido Matt. Algunos ya le descubrimos en series como Veronica Mars y para el resto será una auténtica sorpresa ya que su rostro (mezcla de maldad y melancolía) es perfecto para el mundo del terror. De hecho, su intepretación le ha abierto las puertas en el género y próximamente lo podremos ver en Jennifer"s Body o en la nueva entrega de Elm Street.

Exorcismo en Connecticut continúa la línea marcada por títulos como La Morada del Miedo y se convierte en un título terrorífico y muy recomendable a partes iguales.

Lo Mejor: Kyle Gallner.
Lo Peor: No aporta nada nuevo.

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