"JAULA": Entrevistamos a Elena Anaya e Ignacio Tatay

Por Redacción Publicado el 09/09/2022

La cinta producida por Álex de la Iglesia que ya está en los cines de nuestro país

‘Jaula’, el primer largometraje de Ignacio Tatay, llega hoy a nuestros cines. Protagonizada por Elena Anaya y producida por Pokeepsie Films, la productora de Álex de la Iglesia y Carolina Bang, hemos podido charlar con el propio director y la actriz protagonista unos días antes de su estreno.

Ignacio, no sólo diriges esta película, también la escribes, ¿qué te inspiró a la hora de escribir esta historia?
Ignacio: ‘Jaula’ nace de una serie de sucesos, de casos reales, de la vida. Leí unos casos reales que me llamaron tremendamente la atención, me causaron un intenso miedo y tuve la necesidad de entenderlos. A partir de ahí empieza el desarrollo de ‘Jaula’ de la mano de un asesoramiento de psicólogos forenses, y luego se unió Isabel Peña, una gran guionista, a escribir conmigo esta historia. Básicamente ese es el germen de ‘Jaula’.

¿Cómo fue el rodaje en plena pandemia? Supongo que difícil, aunque sea una película muy contenida…
Ignacio: Es una historia muy extraordinaria la que sucede. Supongo que por contención te refieres al naturalismo que hay, tanto en la interpretación como en la cámara… para mí el cine es un punto de vista y quise aproximar al espectador todo lo posible al personaje de Elena. Eso tiene que ver mucho con las decisiones en todos los campos, desde fotografía, a dirección de arte e incluso a las propias localizaciones. Respecto a la pandemia, fue algo que nos sorprendió muchísimo a todos.

Elena: Totalmente, llevábamos ocho días rodando tras tres meses de ensayos y eso nos colocó el primer día de rodaje en un lugar donde ya habíamos logrado llegar a entender muy bien a nuestros personajes, habíamos atravesado el recorrido varias veces y sabíamos que tecla tocar en cada secuencia, hasta donde teníamos que llegar. Para mí esta película estaba en la cabeza de Ignacio, él es un autor muy cuidadoso, riguroso con cada uno de los detalles. Cada cosa que hay en la película cuenta, aporta. Ignacio nos trasmitió a todos la necesidad de contar esta historia de la manera en que él la entendía y creo que se rodeó del equipo técnico y artístico adecuado para ello.

Ignacio, ¿tuviste alguna película como referente?
Ignacio: Sí y no. Te lo podrán decir tanto el director de fotografía, Uri Barcelona, como el director de arte, José Tirado, o la directora de vestuario, Rebeca Durán, y es que veté las referencias de otras películas en los dosieres iniciales. Las películas que te han gustado acaban permeando en lo que haces, pero lo importante es entender lo que estás contando; pedir referencias pictóricas, de arte, documentales… pero no de otras películas. Luego empiezan a aparecer paralelismos como ‘La semilla del diablo’, te podría dar muchísimos referentes, pero en un principio estaban vetados hasta antes del rodaje, momento en que Uri y yo empezamos a tratar otras películas, aunque fue sobre todo por un tema de lenguaje.

¿Cómo fue trabajar con Eva Tennear? La niña está genial en la película, pero sería complicado el trabajo con ella.
Elena: Para mí no lo fue. Me sorprendió mucho que Ignacio encontrase a esta niña, de hecho se fue al fin del mundo para traerla. Cuando vi su prueba, los dos nos pusimos a llorar porque era exactamente ella, no podía ser otra persona. Me ha pasado algo muy bonito con ella y es que me ha enseñado mucho. Para mí el germen de la actuación es el juego, ella tenía seis años cuando hizo esta película y ya era actriz, es tremendamente inteligente. Le contamos un relato paralelo a lo que queríamos contar en la película para que ella no sufriese ningún tipo de irrupción en su infancia y lo hicimos todo a través del juego. Además, tuvo una coach estupenda y, por supuesto, también estaba el trabajo meticuloso de Ignacio en dirección. Yo intentaba ayudarla a entrar a en situación y dedicamos mucho tiempo a conocernos y crear ese vínculo, tanto que llegamos a comunicarnos casi sin hablar, sólo sintiendo la energía de las dos.

Ignacio: Elena invirtió mucho en el vínculo con Eva y eso se ve en la película. Es que Eva es un portento y en el rodaje nos ha regalado momentos únicos. Nos ha dejado maravillados en varios instantes.

Tras ‘Jaula’, ¿por dónde te gustaría llevar tu carrera? ¿Quieres seguir con terror?
Ignacio: Pues eso no se sabe nunca porque el género, no hablo de terror sino en general, es un vehículo para contar una historia, pero en el terror estoy muy cómodo y creo que no estoy listo para abandonar. He aprendido mucho con esta película y quiero volver a ponerlo en práctica.

¿Y a ti, Elena? ¿Te gustaría volver al terror?
Pues para mí no es importante el género en si, sino la experiencia que tienes haciendo cada película. Esta ha sido apasionante. Creo que es una de las más difíciles que he hecho y más preciosas a la vez. Hemos contado una historia terrorífica, de mucho miedo, pero es un viaje luminoso, y el contraste creo que es muy apetecible siempre de contar y de ver como público.

Por Pablo Pastor.

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